CONCLUSIONES:

1.-  Aplicar el Modelo Homeopático en un  Sistema Nacional de Salud, no ha sido fácil, ha sido una lucha de muchos homeópatas, avezados que se han atrevido a romper  las barreras que el modelo convencional nos ha impuesto, abriendo espacios que a muchos se nos había negado, este hecho en nuestro país ha sido un parteaguas, que no ha estado exento de críticas e intereses creados, y en ocasiones son  solo de formas y conceptos, considero que los que  hemos trabajado en el sistema convencional por muchos años, a pesar de ser formados dentro de los principios homeopáticos ortodoxos y unicistas, finalmente vemos la posibilidad de demostrar que nuestro método funciona en un sistema institucional sin caer en el peligro de la burocratización y tecnificación de la medicina, es evidente que las guerras se ganan en el campo de batalla y con la mejores armas posibles, es ahí en los centros de alta concentración de enfermos donde podemos aplicar el método, con nuestra técnica clínica más depurada, concretar trabajos de investigación clínica, bajo cualquier premisa, demostrar que nuestro método de experimentación pura es la mejor evidencia de los efectos puros de cualquier sustancia con poder medicinal, capaz de producir un efecto positivo en el individuo enfermo, demostrando que el principio de semejanza tiene sustento en la praxis, entrenar a los futuros homeópatas, en la cabecera de los enfermos hospitalarios, aprovechando la fineza clínica del Internista, la exquisita  habilidad del cirujano, y la rapidez en la toma de desiciones del urgenciológo.

2.- Por sus fundamentos teóricos, doctrinarios y científicos no debería de ser considerada como una simple terapia “alternativa y/o complementaria”, es todo un modelo médico, capaz de funcionar en cualquier Sistema de Salud de cualquier país.

El secreto de la medicina es distraer al paciente mientras la naturaleza se cura a sí misma (Voltaire)

Finalmente tuve que preguntarme si nuestro entendimiento y nuestro concepto de enfermedad no habían sido completamente erróneos debido a nuestra ignorancia acerca del propósito biológico de la enfermedad."
(Dr. Ryke Geerd Hamer)

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